lunes, 22 de febrero de 2016

Todas las relaciones son amorosas

Dice por ahí una frase que "en la medida en que amamos, también somos capaces de dañar al otro". Independientemente de las distintas posturas con respecto al amor, al odio y sus derivados, todos nos hemos relacionado con alguien más de uno u otro modo, es parte de nuestra naturaleza, somos seres gregarios que difícilmente podemos estar solos, y cuando lo estamos tenemos la tendencia a evocar recuerdos que nos remiten a situaciones en las que nos vemos acompañados de alguien más. El ser humano no es producto de su propia actividad individual, sino de las interacciones que ha establecido con el correr de los años, desde que vino a este mundo. 

Las relaciones son tan complejas y complicadas que nos hemos dado a la tarea de clasificarlas de acuerdo con ciertos criterios tan variables y específicos como quien los sugiere: podemos hablar de intensidad, prolongación, parentesco, trabajo, etc. y con base en ese criterio,  agregamos una carga emocional con todo y sus niveles, así, decimos que se quiere más al hermano que al amigo, al perro que al vecino, a la madre que a la novia y un larguísimo etcétera. En efecto, nadie le dice (o al menos no muchos) al vecino que lo ama, no, al vecino, como dicen los buenos norteños "se le quiere". No podemos concebir el sentimiento de amor fuera de las personas que no están en nuestro círculo interno e incluso entre ellas, hacemos diferencias con respecto al amor. 

El problema con lo anterior, radica en nuestro propio lenguaje o mejor dicho idioma, ya que cuando a afecto nos referimos, tenemos varias palabras, cada cual, más intensa que la otra: a los que queremos poquito les decimos que los queremos y solo a los novios o novia los amamos. Sin embargo, en inglés solo existe una palabra para decirle a alguien que lo queremos: LOVE, independientemente de si es amigo, novio o conocido. ¿Ahora ven por qué nos complicamos tanto para el amor? 

El problema no es el sentimiento ni las palabras con que se expresa, lo que debe de ocuparnos es el compromiso con nosotros mismos en relación con el amor.

Psicólogo Alejandro Monreal
Grupo Miranda Psicología Especializada

No hay comentarios.:

Publicar un comentario